El 25 de abril de 1974 un grupo de militares portugueses derrocó una de las últimas dictaduras que quedaban en Europa Occidental en el siglo XX y se presentó al país con un programa político basado en tres pilares: Democratizar, Descolonizar y Desarrollar. La conocida como «Revolución de los Claveles» inauguraba la «tercera ola de democratización» (Samuel P. Huntington), que después alcanzó a España, Grecia y decenas de países de América Latina, Asia y el Pacífico, África y Europa del Este.

Un año antes, en abril de 1973, en el III Congreso de la Oposición Democrática (Oposição Democrática), se presentó una tesis que José Medeiros Ferreira había enviado desde su exilio en Suiza. En dicha tesis, que fue recibida con desconfianza por varios sectores de la Oposición y se revelaría como premonitoria, el autor subrayaba la necesidad de una implicación del ejército, ante todo para acabar con la dictadura y la guerra en las colonias africanas, y también para apoyar la ejecución de un plan de acción nacional que condujera, justamente, a la descolonización, la democratización y el desarrollo.

De la pluma de Medeiros Ferreira —quien, vuelto del exilio poco después de la revolución, desempeñó un papel relevante en la apertura de la joven democracia portuguesa a Europa y al mundo, y más tarde se consolidó como uno de los más brillantes estudiosos de historia contemporánea de su generación— salió a la prensa en 1983 el Ensayo Histórico sobre la Revolución del 25 de Abril que ahora se edita en lengua española.

En este primer intento, pionero y atrevido, de registrar la historia de la revolución portuguesa, reconociendo los riesgos de la proximidad temporal entre el texto y el objeto de estudio, así como de la proximidad entre el narrador y la acción histórica en la que fue participante, el autor se impuso un redoblado esfuerzo de rigor metodológico, sobre todo en la selección, el análisis y la interpretación de las fuentes disponibles, legando una obra que sigue siendo fundamental e intelectualmente desafiante.